PRIMERAS MAREJADAS DEL OTOÑO-SALPICADURAS

 De modo casi imperceptible vamos adentrándonos en el Otoño. Los aún cálidos rayos de sol pueden producirnos falsos espejismos, en los que se reflejan los días estivales que en su día no tuvimos. Pero los atardeceres naranjas, los ocres del paisaje y las calimas al atardecer, son claramente otoñales.

La vecindad próxima de la Luna Llena  trae consigo las primeras pequeñas marejadas de la estación que comienza, y con ellas se producen las primeras salpicaduras con charcos que reflejan los cielos multicolores y algún que otro baño improvisado entre los despistados viandantes y los niños que alegremente torean las olas.